Me apetece echar una miradita al exterior, ya comienza el frío, despertino, nocturno... a intervalos entre el sol radiante del medio dia y el vaiven de las nubes... el otoño ha llegado, afortunadamente.
Me apetece girarme, como en la fotografia y descubrir detalles, destellos, pequeñas y grandes cosas que estaban ayer ahi y que mi ánimo no me dejo verlos.
Me apetece sondear el espacio exterior, la calle, el autobus, el cine, el supermercado... y descubrir que en cada uno de esos espacios se esconde algo inaudito, algo espeluznante, divertido, grotesco, diferente, travieso, singular...
Me apetece compartir momentos y vivir intensamente, creo que estoy en camino... proyectando un nuevo viaje (uy¡, que raro yo viajando) y colmando de ilusiones mis dias hasta disfrutarlo, sorbo a sorbo, mirada a mirada... lo bueno de viajar es que ya lo haces desde mucho antes de comenzar la travesia.
Me gusta estar donde estoy, no podria apetecerme nada mas...
5 comentarios:
Ha sido un aire fresco leer este post y sentir con tu texto el crecimiento humano. Que palabra más emotiva y hedonista,"intensidad", su sonido me envuelve. Gracias por compartirlo. Besos Amiga.
Cierto es que hay palabras que si paras a pensarlas un instante puedes sentir todo su peso sobre nuestra espalda, sobre nuestra conciencia, sobre nuestra memoria... "intensidad, necesidad, siempre, jamas, nunca, eternidad, inmensidad...". Besos Agus, me gusta compartir contigo pequeñas cosas...
S� tienes raz�n, los viajes, tras aparecer en nuestra mente viniendo de qui�n sabe d�nde, necesitan un tiempo de gesti�n.
Carlos: Necesitan Un tiempo de gestion y conllevan un tiempo de disfrute, luego, viene el tiempo de la desgustacion y ese, viene cuando ya llevas en casa, despues del viaje, varios días... es lo bueno y lo grande de viajar (para quienes nos gusta hacerlo, claro) que se prolonga antes, durante y despues de la aventura. Saludos
A veces uno necesita esforzarse en el intento de contemplar las cosas con la esperanza de sentir otra forma de percepci�n. Que se nos haga visible esa esencia que habitualmente se nos pasa por alto.
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